Mirar la meta desde la Plaza Mariana. Prepararse estirando los músculos de brazos y piernas. El lado oriente de la basílica de Guadalupe, desde el templo del pocito, hasta la capilla del cerrito, las escalinatas tienen 210 escalones. Ascender corriendo y descender cada escalón hasta 5 veces, es una experiencia física extraordinaria. El marco del ascenso y del descenso es observar el hermoso jardín de las rosas, escuchar la caída del agua en cada fuente. Observar la meta y seguirla mentalmente. Llegar a la meta, dar gracias y el premio la hermosa vista de la ciudad de México. El descenso por la parte poniente es de 200 escalones, es hacerlo reposadamente, de forma espaciada, recorriendo la mirada del horizonte y llegar al bautisterio. Realmente una experiencia física y mental de sólo 10 minutos.

Comentarios

Entradas populares